¡Playa y sol, costa mediterránea!

La semana pasada, volviendo de Mallorca decidí hacer una parada en Valencia.
La costa mediterránea se caracteriza por su olor a mar, su sol, sus aguas... y su comida.

No hay nada más mediterráneo que una ciudad costera donde el mediterráneo baña sus costas.
Hoy hablaremos de la paella y de la horchata, lo más típico de la zona.



La paella

Es un modelo de sartén ancha, sin mango pero a veces con asas. De ahí, también se refiere a una receta de cocina con base de arroz cocinado. Como receta, se trata de un plato de origen humilde. Su popularidad creció tanto a nivel internacional que hoy en día es un plato que puede encontrarse en los restaurantes de occidente.

Esta popularidad ha hecho que la paella haya ido sufriendo transformaciones desde la receta original de la paella valenciana (de pollo, pato, conejo y caracoles) y hayan aparecidos variantes como la paella marinera elaborada con una combinación de pescado y/o marisco y la paella mixta en ocasiones también denominada mar y montaña, que consiste en una mezcla de carne y marisco (o pescado)  

Horchata y fartons

La horchata de chufa, son unos pequeños tubérculos con forma de nudos que provienen de las raíces de una planta llamada juncia avellanada que recibe este nombre por tener frutos con forma de avellana. Es una bebida refrescante (también postre), preparada con agua, azúcar y chufas mojadas (o molidas), además de ingredientes que potencian su sabor, como la canela y la piel de un limón.

Acompañadas con fartons, un dulce de bollería alargado y con azúcar glaseado típico del municipio valenciano de Alboraya, tenemos la merienda típica de toda la comunidad valenciana.

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